domingo, octubre 25, 2009

El Tráfico en Puebla

EL TRÁFICO EN LA CIUDAD DE PUEBLA

El crecimiento y extensión de la ciudad de Puebla, no se ha dado de forma ordenada y planeada pese a que es considerada como una de las ciudades de la República Mexicana mejor trazadas. Me viene a la mente la época en que el transporte era diferente y no sé contemplaba la idea de un automóvil, en aquél tiempo no se imaginaron que en unos cuantos años experimentaríamos los problemas de transporte que hoy en día enfrentamos.

Hoy en día la Ciudad de Puebla posee un déficit de desarrollo y severo retraso en cuanto a estructura vial y transporte público se refiere, mientras que en otros estados tienen planeada su logística, en Puebla estamos aún atrasados. Se han dado algunos pasos, por ejemplo en el año 2000, se empezaron a construir “los cruceros inteligentes para el rápido movimiento del tráfico que en los últimos años ha crecido un 70%”.

“Un reciente proceso de reorganización urbana, crecimiento, remodelación y reorientación de las vías para los diversos medios de transporte que circulan en la ciudad la ha cambiado, enloqueciendo y empeorando aun más la situación”, muchas obras obligan a cerrar calles no habiendo vías alternas eficientes que ayuden a descongestionar la circulación.

El tráfico de la ciudad se caracteriza por ser intenso y complicado sobre todo en horas pico consideradas entre las 07:30 - 09:30hrs, las 12:45 - 14:30hrs y 18:30 y 21:00 hrs., si podemos observarlo nos quedamos sorprendidos ante la conducta imprudente de algunos conductores y peatones al cruzar las calles en particular las grandes avenidas siempre transitadas y congestionadas.

Se desencadenan diversos problemas de índole vial e imagen urbana que ocasionan tráfico vehicular intenso, saturación de la mayoría de las vialidades de la ciudad y grandes pérdidas de tiempo, recordando los efectos que estas situaciones causa tanto en peatones como en conductores tales como: estrés, nauseas, dolores de cabeza, frustraciones, etc.

Nos estamos volviendo cada vez más vulnerables a nuestro entorno en lugar de adaptarnos y ver que si las cosas fueran manejadas bajo otro enfoque y de manera diferente el resultado sería favorable para todos.

“Los mismos conductores y peatones manifiestan una intención conductual que refleja claramente una decisión consciente de infringir la norma”, es decir, se trata en general de los usuarios de las vías quienes deliberadamente despliegan un comportamiento de riesgo y además perjuicio, porque relentizan la fluidez del tráfico.

Los conductores de los autobuses al ver los carritos de forma miniaturizada sienten posiblemente que poseen tanto poder en las vías, que al final, autobúses y conductor son una sola cosa, este conductor del transporte colectivo con tal de lograr llegar primero a su parada y ganarle el pasaje al autobús que viene tras de él, pasando por alto todas las reglas de tránsito, los semáforos, le importa poco si con su conducta rompe con el Reglamento de Tránsito.

Esta conducta procrea reacciones en cadena, los peatones también cometen infracciones, ya que observan que no hay policías, la policía se encuentra en esos momentos en su “trabajo”, el caso es que poco pueden hacer ante todo ese caos. ¿A quién pueden ellos detener? cuando la gente sale corriendo de sus casas hacia sus trabajos y viceversa. Provocaría todo un gran problema de congestionamiento y eso sucede en la mayoría de los casos, porque todos somos culpables.

Algunos peatones cruzan con total seguridad de que el vehículo próximo tiene la obligación de parar: Nada más incierto, este paso es preferente para los peatones sí, pero con precaución y cuando el vehículos se halla a distancia prudente que le permita frenar con seguridad.

Existen por supuesto grandes cantidades de bicicletas y motocicletas que los autos no respetan y no dan espacio, tirarle el carro a la bicicleta es una costumbre y desde luego nuestros intrépidos en bicicleta ó motociclistas no poseen ni la mínima idea de las reglas de tránsito aplicables a ellos pero…no hay que culparlos.

La Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal hace un llamado a los automovilistas para que circulen con precaución, pero hemos demostrado que no tenemos aún la responsabilidad civil. No sólo es nuestra culpa porque esa educación no se tiene, sino que es un problema que se ha arrastrado por mucho tiempo y que se ve como parte normal de nuestro entorno. No ha existido realmente una educación para que los conductores, refiriéndonos a todo tipo de conductor, así como peatones respeten las señales de tránsito, es necesario un cambio verdadero y radical que permita colocar los cimientos para nuestra educación vial.

Darle soluciones al problema de tráfico es imposible si la educación de la población no permite que las reglas se implementen. Tratar de introducir medidas para reorganizar y reducir los problemas del tráfico, pueden funcionar, en la medida que se tendría que re-educar a la gente.

Resulta sorprendente el impacto que puede tener una buena educación y reglas conocidas para la mejora en el transporte en la Ciudad de Puebla, hace falta un buen reforzamiento de valores civiles y éticos para todos.